Contexto: bosques en Rumanía, castillo de Malvenor Castle, año 2010
Personajes:
-Turistas: grupo de mujeres, hombres y niños que vienen desde España para hacer turismo; se perderán en el bosque y acabarán todos muertos excepto un niño.
-Conde Von Hall: dueño de Malvenor Castle y pariente actual del conde Drácula, por lo que también vampiro; matará a los turistas
-Amelia: joven de 20 años, ha ido de viaje turístico a Rumanía con su novio Tom. Se salvará por los pelos del conde.
-Tom: muchacho de 21 años de viaje en Rumanía con su novia. A final dará su vida para salvar a Amelia y a un niño de las garras del conde.
-Narrador: yo mismo
Resumen: un grupo de turistas españoles se pierde en unos bosques rumanos. De improviso ven, en la lejanía, un castillo. Se dirigirán hacia allí para cobijarse y acabarán todos muertos cuando el ser que lo habita los acorrale en su interior.
Guión:
-Narrador (música de miedo 1): La luna iluminaba, sobre sus cabezas, el extenso bosque que recorrían desde hacía horas. Todos empezaban a tener frío, y para colmo, cada vez estaban más perdidos.
-Turista 1 (hombre, voz grave): Maldita sea, llevamos horas caminando y todavía no hemos salido de este dichoso bosque.
-Turista 2 (mujer): No debimos hacer caso de aquel guía. De no ser por él no estaríamos aquí.
-Turista 3 (hombre, voz normal): Y sin embargo, seguimos aquí. Así que, por favor, dejen de quejarse. Estamos todo en esto.
-Niña: ¡Mirad, allí!
-Narrador: Todos miraron adonde la niña. Allí, sobre un pequeño montículo, había un castillo rodeado de un foso de agua pantanosa.
-Turista 1: Eso es, vayamos a cobijarnos allí.
-Narrador: Aunque un poco reticentes, todos se encaminaron. Al final de todos ellos, una pareja iba cogida de la mano.
-Amelia: ¿Debemos ir al castillo, Tom?
-Tom: A menos que prefieras quedarte aquí fuera.
-Narrador: Poco después estaban todos ante las puertas de la construcción. Estas se abrieron y apareció un hombre de unos 30 años, rubio y de ojos verde esmeralda.
-Conde (voz melosa): Vaya, otro más...
-Turista 1: ¿Disculpe?
-Conde: Son un grupo perdido, ¿no? Verán, cada dos por tres debo acoger a uno. Ese maldito guía no tiene ni idea de donde se encuentra el verdadero camino. Pero pasen, no se queden fuera.
-Narrador: Cuando las puertas se cerraron, la niña que había divisado el castillo supo que no volvería a ver la luz. El conde los atendió servilmente y una orda de criados los prestó unas batas para que se calentaran.
-Amelia: Es extraña tanta atención.
-Tom: Lo se, también me he dado cuenta.
-Narrador: Cuando todos estuvieron debidamente cálidos en sus mullidas batas, el conde los llevó al comedor. Todos se sentaron y él habló.
-Conde: Vaya, veo que no tenemos nada que cenar.
-Narrador: Todos los turistas comenzaron a mirarse nerviosamente.
-Conde (voz malvada): Bueno, no pasa nada. Ustedes mismos servirán.
-Narrador (música de miedo 2): De repente, se abalanzó sobre la mujer sentada más cerca de él y la mordió en el cuello. Viendo esto, Tom arrastró a Amelia fuera del salón y echaron a correr, con algunos turistas tras ellos. Poco a poco fueron cayeron todos, mediante trampas, tropezones y choques. Al final sólo quedaron Tom, Amelia y dos del grupo de turistas. De repente, Amelia se tropezó, cayéndose junto con Tom. Él pidió ayuda, pero le ignoraron.
-Turista 1: Los siento, pero no puedo hacer nada por ti muchacho.
-Narrador: Un segundo después estaba tirado en el suelo, con el mayordomo mordiéndole. Tom levantó rápidamente a Amelia y tiró de ella por un pasillo. Se escondieron en un cuarto y cerraron tras ellos. Escucharon al conde tras ella.
-Conde: Maldita sea, ¿dónde se ha metido aquella pareja? Son los que mejor saben.
-Narrador: De improviso, la puerta que tenían delante de ellos se abrió y un niño, hermano de la pequeña que había visto aquella prisión, entró. Entonces Tom agarró a ambos y, dando una patada a la puerta, tiró al conde de un golpe y echó a correr con Amelia y el niño de cada mano.
-Conde: ¡Volved aquí! ¡No tenéis ninguna posibilidad de escapar!
-Narrador: De repente Tom se paró.
-Tom: ¡Seguid corriendo!
-Narrador: Amelia agarró al niño y tiró de él. Tras ella, escuchó como Tom luchaba con el conde con una espada. Entonces escuchó un gemido, por lo que corrió más aprisa. Ya llegaban a la puerta, pero el conde los seguía. Afuera, amanecía.
-Amelia: ¡Aguanta, ya llegamos!
-Narrador: Entonces la lámpara que había sobre ellos comenzó a caer y aplastó, tras ellos, al conde. Amelia se giró a y vio a Tom, cubierto de sangre, con una espada y una cuerda en el mano. Luego se desplomó. Ella cogió al niño y atravesó las puertas cuando estas se cerraban.
-Amelia (llorando): Tom...
-Niño: Gracias.
-Narrador: Amelia y el niño se abrazaron, llorando. Habían sobrevivido a una noche de espanto.